PADRE JULIO TAMAYO


   El padre Julio Tamayo juega el papel más importante en la historia de Carolina del Príncipe, reconocido en toda la comunidad por sus grandes obras, obras que son importantes en la historia y actualidad del municipio, este párroco nunca desistió en dejar de trabajar por los carolinitas, trabajo reflejado en el amor de los carolinitas hacia él.



    Nacido en Carolina del príncipe el 14 de enero de 1889, inició su labor sacerdotal como capellán del hospital San Rafael de Carolina. Es el sacerdote más ilustre de Carolina en toda su historia siendo párroco del municipio por más de 20 años realizando en este periodo grandes obras a favor de toda la comunidad, fue el fundador de la NORMAL LA INMACULADA que en sus inicios era una normal de señoritas, además fundó también el liceo que en su honor lleva su nombre PBRO. JULIO TAMAYO; el padre Julio Tamayo nunca se cansó de trabajar por la comunidad carolinita, reflejado en sus obras que a través de la historia son una de las más importantes para todos los carolinitas.



    Con la Sra. Nina Vélez y la Sra. Irene Morales, fueron los encargados de fundar el albergue SAN JOSÉ el cual en la actualidad sirve a la comunidad hace más de 55 años, se encargó de adornar y decorar en el templo bellamente, fue él quien ayudó a construir el cementerio uno de nuestros atractivos turísticos más importantes ya que es una réplica de la plaza de san Pedro en Roma único en Antioquia y se podría decir que en toda América.



    El padre Julio Tamayo es uno de los personajes más insignes de la historia de Carolina, por todas sus obras y ayudas a la comunidad en el año 2.014 fue declarado el personaje del bicentenario, año en el cual se le realizó un homenaje para reconocerle el amor, la entrega y el compromiso que tuvo hacia toda la comunidad carolina.



    Murió en el municipio que tanto lo ama, murió en Carolina del Príncipe, sus restos reposan en el cementerio parroquial, en una cripta especial construida para él. Se puede mencionar que el padre Julio Tamayo es el sacerdote, el hombre, el personaje más importante que ha tenido Carolina del Príncipe en toda su historia.



    El municipio de Carolina del Príncipe vivirá agradecido con el padre Julio Tamayo por su carisma y compromiso hacia toda la comunidad, siendo el fundador de una de las más importantes instituciones del municipio, su paso por Carolina dejó una gran huella en su historia, los carolinitas no podemos olvidar a esta gran persona que hizo tanto por la comunidad.


Simón.



El presbítero  Julio Alejandro Tamayo Restrepo, nació el 14 de Enero de  1889, en Carolina del Príncipe,  hijo de Jesús María Tamayo y Sara Restrepo.

  Desde pequeño demostró su vocación sacerdotal,  para lo cual ingresó al seminario de San Pedro y de allí se trasladó al Seminario Mayor de Santa Rosa de Osos, ordenándose como Sacerdote  el 18 de Septiembre de 1920  por el Señor Obispo,  Monseñor Maximiliano Crespo.

   Se destacó por ser una persona muy estudiosa y se capacitó además en el idioma latín.

  Se inició como sacerdote capellán del hospital San Rafael de Carolina, posteriormente y con el mismo rango, fue trasladado a Yarumal, luego de esto pasó a Gómez Plata, Amalfi, y de nuevo volvió a Gómez Plata, también  estuvo en Santa Rosa de Osos donde fue un entusiasta colaborador en la construcción del Santuario a la virgen de las Misericordias, en 1927 llega a trabajar al municipio de Ituango donde construyó la casa cural y la casa del refugio, además le da un vigoroso impulso a los trabajos del centro de salud, triplicando su ejecución dotándolo de modernos servicios y mejoras.

  El 21 de febrero de 1940 tomó posesión como Párroco de Carolina del Príncipe, (el número 32 en la sucesión parroquial) donde permaneció por un tiempo de 21 años consecutivos hasta Septiembre de 1961, cuando por  capricho de algunos ciudadanos del  pueblo,  el Reverendo sacerdote, fue  expulsado de la parroquia  de Carolina del Príncipe.

   Luego el mismo pueblo lo convenció para que volviera a su lugar natal, y cuando lo hizo fue recibido con desfile de carros, cabalgata, pólvora y una programación especial.

    Entre sus obras realizadas en su pueblo natal están:

   El embellecimiento y decoración  del templo parroquial:   Para lo cual,  reformó los altares laterales subiéndolos a nivel del presbiterio; niveló la sacristía, bajó los cielos rasos y los arcos. Cambió los tradicionales reclinatorios por bancas; decoró lujosamente los altares, iluminando el brillo del oro el lugar del Santísimo Sacramentado; la mesa del Altar Mayor enchapada en plata; construyó una Capilla a Jesús Crucificado y promovió la devoción con el ejercicio de los siete lunes, que se cumplen anualmente; la construcción de los Altares al Señor Caído y a  Nuestra Señora de las Mercedes, con la ayuda del feligrés Fidel Cardona; dentro de las reformas emprendió la del cambio total del frontis en el año de 1956; las puertas laterales se taparon y fueron reemplazadas por las nuevas del frente, en uno de esos lados quedó el Bautisterio y en el otro las escalas que suben al nuevo “coro alto”, el cual quedó más ancho con órgano moderno; realizó la total decoración del interior en óleo.

  Fundador del cementerio: Para el cual lo mandó a construir como  una réplica de la plaza de San Pedro en Roma, es por esto que el cementerio  tiene  forma redonda.

    Fundador del albergue San José.

   Fundador del colegio Presbítero Julio Tamayo: En  1957, el pagaba los maestros con plata de la parroquia, hasta que logró conseguir  la creación  y aprobación del Departamento de Antioquia, fue él quien  consiguió los laboratorios  de Física y Química, para que le pudieran dar la aprobación a la Normal, trajo las hermanas carmelitas para que dirigieran la educación normalista.

  Fue un gran líder en los lugares de trabajo, era una persona muy recta, vertical,  honesta, de una moral intachable, de principios éticos, morales  y religiosos.

   Murió en Carolina su tierra natal el 29 de Enero de 1967, a las 12:00 del día, en el momento en que sonaba el Avemaría, en la casa donde ahora fue construido el hotel spa.  Diez minutos antes de morir llamó a su tía Carmen Emilia y le dio sus últimas instrucciones con respecto a su testamento diciéndole que tenía un dinero en un Banco en la ciudad de Medellín,  pero que este dinero era del pueblo y debía volver al pueblo para él irse tranquilo y en paz con Dios. Y por lo tanto se repartió entre las distintas entidades por las que él tanto lucho. 

Junior,Helen,Daniela.


   

6 comentarios:

  1. Su tumba no tiene ningun lujo.,Ni adorno,nunca se ha destapado para ver si su cuerpo fue consumido o permanece entero.puede que este entero como marianito que esta momificado.

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  2. Aló bien busco es la historia de la escuela no la historia del fundador

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  3. Hola, soy Divis Tamayo, la bisnieta de Francisco Luis Tamayo Restrepo, hermano del padre Julio Tamayo. He estado investigando sobre la familia y he encontrado este articulo que ha sido de gran ayuda. Si tienen mas información o saben donde puedo encontrar mas por favor me dejan saber
    Divis1781@hotmail.com
    Gracias

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  4. Hola buenas tardes...mi papá Jaime julio Jiménez Tamayo.. era sobrino de padre julio Tamayo..en Carolina del principe.. Antioquia..me gustaría contactarme..con mis parientes.. gracias

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  5. Mi papá recuerda mucho al padre Tamayo, quien era su tío abuelo. Mi abuela fue a Carolina del Príncipe a recibir sus pertenencias cuando murió.

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