IGLESIA CRISTIANA - MOVIMIENTO MISIONERO UNIVESAL

En esta ocasión en el encuentro con el pastor Marcos Suárez quien representa La Iglesia Cristiana Movimiento Misionero Universal, institución que en palabras de su representante tiene una gran misión donde su más fuerte deseo es el bienestar de las personas sin el ánimo de lucro, dando a conocer Jesucristo como salvador y redentor; en su discurso manifiesta que la iglesia a la cual representa se encuentra en más de setenta países realizando su labor misionera y que para el caso de Carolina del Príncipe está en su etapa inicial.

Este movimiento, tiene la misión de dar a conocer el evangelio, tal vez, la imagen que se tiene de la labor misional que realiza no sea favorable pero poco a poco se ha estado cambiando la perspectiva con nuestro proceder en la comunidad apoyando sus habitantes incluido, nuestros contradictores; pues deseamos mostrar lo que vivimos que ante todo es el evangelio que guía nuestro proceder porque este es el poder de Dios para salvación, nuestro verdadero enemigo son las tinieblas no las personas. Mi trabajo – Dice el pastor-  también incluye visitar las diferentes veredas y buscar que la sociedad conozca la importancia de la salvación del alma

En el transcurso de la presentación de esta institución, su representante nos comparte un fragmento de su historia personal y su inserción en la iglesia que ahora representa en el municipio, para esto nos dice que en un momento histórico de su vida fue delincuente,  drogadicto y mula del narcotráfico e incluso estuvo en la cárcel; pero la misericordia de Dios es infinita y le dio la oportunidad de cambiar y corregir su camino, y enfatiza diciendo: “mi mayor experiencia más que cárceles y centros de rehabilitación y psicólogos ha sido conocer a Jesús, ha sido el momento en el que le permití entrar en mi vida, el momento en el que abrí mi corazón a Jesús”. Una de las anécdotas que el pastor nos cuenta sobre sus experiencias  también ha sido que en un momento determinado de su vida recibió un disparo y quedó inválido, ingresó a la cárcel y allí le entregó su corazón a Jesús quien hizo un milagro y le permitió volver a caminar.

El pastor termina su intervención compartiendo un desafortunado incidente, pues en algún momento fue invitado ayudar o prestar apoyo a una institución pero muchas personas se opusieron simplemente por no tener las mismas creencias que ellos; para lo cual, el argumenta que su deseo como iglesia es ayudar a la comunidad y a los habitantes respetando la diferencia, y si alguien desea compartir sus creencias y modelo de vida es una decisión personal por lo que invita al grupo presente a permitirle a su institución ayudar o apoyar procesos que desarrollen como institución o como familias.